Ayer, día 17 de Diciembre, se celebró, tal como venía anunciado, el tradicional concierto de Navidad de la Coral San Antonio de Benagéber.
Esta vez la calidad la refleja la cantidad. La cantidad de público asistente, la Iglesia a rebosar, arriba y abajo.
El concierto estuvo fenomenal, como siempre, con esos finales que se van extinguiendo y te dejan sin respiración.
Hubo quien se emocionó hasta las lágrimas con el Noche de Paz, porque se incorporaron los niños y oír cantar niños en Navidad enternece, porque nos rescata de la zafiedad social del momento.
Pero ese capítulo fue a más: el director nos anunció una sorpresa. Vean las fotos, vean los vídeos.
Y es que aparecieron unas criaturitas de Benin -”Voces por Benin”- que bailaron y cantaron con esa gracia energía y ritmo que tienen los africanos, y nos dejaron atónitos.
Obviamente esto le dio un giro al concierto que pasó de experiencia estética a servicio para los más desfavorecidos… y eso lo engrandece mucho mas.
Y así fue, vendieron unos calendarios, ilustrativos de su vida, pobreza y sufrimiento, pero también nos concienciaron de que hay gente maravillosa que tiene por divisa ayudar a los demás. Como Clara Arnal, que lleva adelante Voces por Benim, y desde Juntos por la vida. Y también Andreu Soler, el director que les va a acompañar con su teclado y su buen hacer en su gira por Valencia.
Y es que, una cosa es cantar, y otra bailar…
